sábado, 4 de agosto de 2018

QUE NO TE COMAN LOS MOSQUITOS

Las picaduras de insectos son un motivo frecuente de consulta en los centros de salud. En España habitualmente las picaduras de insectos ocasionan cuadros locales leves que tienden a resolverse espontáneamente en horas o días, sin precisar un tratamiento específico.

¿Cómo se manifiestan?

Reacciones locales: signos y síntomas que aparecen en el lugar de la picadura. Generalmente son leves y transitorios. La lesión típica consiste en una zona enrojecida, hinchada y dolorosa de 1 a 5 cm en el lugar de la picadura que evoluciona en minutos y se resuelve en pocas horas (ocasionalmente puede durar uno a dos días). No suele ser necesario la consulta médica.

Reacciones locales extensas: reacción local de mayor tamaño (10 cm) y que perdura más en el tiempo. Evolucionan en unas 48 horas y se resuelven en 5 a 10 días.

Reacción alérgica sistémica/anafilaxia: puede aparecer en el 0,3 al 3% de las picaduras. Se debe sospechar cuando aparece de manera aguda (minutos o pocas horas) un síndrome rápidamente progresivo que afecta a la piel y/o mucosas (urticaria generalizada, picor, eritema/enrojecimiento, sofocos, edema/inflación de labios, úvula o lengua) junto con al menos uno de los siguientes: dificultad respiratoria o compromiso circulatorio (disminución de la tensión arterial o síntomas de disfunción orgánica como hipotonía, síncope o incontinencia).    

¿Cómo se tratan?

En caso de permanecer el aguijón clavado, se debe de extraer lo antes posible para evitar que siga inoculando veneno. Debe de rasparse cuidadosamente con un objeto romo (tarjeta de crédito, borde romo de un bisturí, etc.). No deben de utilizarse pinzas para evitar apretar el saco del veneno y aumentar la cantidad secretada. Nunca lo retiraremos mediante succión o utilizando las manos.

Lavado y desinfección de la zona con agua y jabón. Puede ponerse algún antiséptico local preferentemente con agentes que no coloreen. De existir ampollas o vesículas, éstas no deben de romperse.

Aplicar frío local (hielo envuelto en una tela) durante unos 10 minutos, retirándolo otros 10 minutos y repitiendo el proceso sucesivamente. Esta maniobra permite bajar la inflamación y disminuir la absorción de algunos venenos.

Si la lesión es muy pruriginosa, las lociones de calamina o amoniaco pueden aliviar (consulte en farmacia). También pueden aplicarse pomadas de corticoide de potencia media o antihistamínicas.

En caso de anafilaxia deberán acudir a un servicio de urgencias.

¿Cómo se previenen?

Evitar los lugares donde haya riesgo de insectos (ríos, estanques, colmenas, etc.). Evitar caminar descalzo en piscinas o campos. Sacudir la ropa que se haya dejado en el suelo antes de ponerla de nuevo. En merenderos o comidas al aire libre es preferible evitar las bebidas azucaradas y mantener los cubos de basura bien cerrados.

Uso de repelentes:

Repelentes naturales derivados de plantas: aceite de eucalipto o citridiol, aceite de citronella. Estos son poco tóxicos y pueden usarse en menores de 2 años.
Repelentes químicos: DEET (N-dietil-meta-toluamida), IR-3535 (etil-butil-acetil-aminopropionato), picaridina. Se recomiendan a partir de los 2 años aunque pueden administrarse por debajo de esta edad en bajas concentraciones a excepción de picaridina.
Dra. Ineva




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