El
verano está a punto de llegar, pero ya estamos en la época de más
exposición a las radiaciones solares. Debemos protegernos de éstas
si no queremos sufrir sus efectos negativos.
No olvidarnos que, el
resto del año, las radiaciones solares también causan un daño a
nuestra piel con un efecto acumulativo, lo que provoca un
envejecimiento prematuro, las manchas solares y lo más importante,
derivar en lesiones cancerosas.
Las protagonistas de esta época son las quemaduras solares.
- Afectan a las capas superficiales de la piel.
- La piel está enrojecida o eritematosa e inflamada. Pueden aparecer ampollas, lo que implica mayor gravedad.
- La recuperación dura una- tres semanas en función de la extensión.
- Son dolorosas y a veces picor.
- Hay una pérdida de líquido importante a través de la piel.
¿Qué hacemos?
- No exponernos de manera prolongada al sol.
- Evitar la exposición solar en la franja horaria de las 12 a las 16 horas.
- Aplicar siempre crema fotoprotectora de 30 o 50 en las zonas expuestas todos los días (cara, manos, zona del cuello, cabeza).
- No pasar por alto los días poco soleados.
- Llevar gorra o visera en personas que presenten alopecia.
- Beber abundante líquido a lo largo del día.
¿Y si nos hemos quemado?
- Aplicar agua fría 15 minutos.
- Aplicar crema hidratante o vaselina varias veces al día.
- Si afectación extensa en mano o cara, consultar a su médico.
- No reventar las ampollas y si lo hacen solas cubrir con gasas y consultar a su médico.
- Beber abundante líquido.
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